“Apartar a nueve días del fin de su mandato al presidente del Senado Federal, jefe de uno de los Poderes, por una decisión monocrática... la democracia, incluso en Brasil, no merece ese fin”, ha declarado este martes el propio Calheiros, tras una reunión mantenida con miembros de la Mesa Directora del Senado.
Una vez finalizada susodicha reunión, la Mesa Directora de la Cámara alta brasileña ha rechazado en un comunicado la decisión “monocrática” del magistrado del Supremo Tribunal Federal (STF), Marco Aurelio Mello, quien el lunes dictó una orden de suspensión temporal contra el presidente del Senado por malversación de fondos públicos para pagar una pensión alimentaria de una hija nacida de una relación extramarital.
Apartar a nueve días del fin de su mandato al presidente del Senado Federal, jefe de uno de los Poderes, por una decisión monocrática... la democracia, incluso en Brasil, no merece ese fin”, ha declarado Renan Calheiros, presidente del Senado de Brasil.
La Mesa Directora también ha informado de que aguardará a que el plenario del Supremo Tribunal Federal, de 11 integrantes, se manifieste al respecto antes de suspender a Calheiros definitivamente.
Se espera que los demás jueces del STF analicen este miércoles si mantienen o revierten la suspensión decidida por Mello.
El Senado, a través de sus abogados, ya había rechazado horas antes de publicar su decisión, la medida cautelar alegando que viola “la separación de poderes” y del mismo modo representa “un enorme riesgo para la marcha normal de los trabajos legislativos”.
El juez Mello aceptó una medida cautelar presentada por el partido de la oposición REDE (la sostenibilidad de la red, en portugués), en la que sostiene que una persona que enfrenta un proceso judicial, como Calheiros, no puede mantenerse en la línea de sucesión presidencial.
Calheiros, un importante dirigente del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), al que también pertenece el presidente del Gobierno, Michel Temer, era el segundo en la línea sucesoria, después del presidente de la Cámara de Diputados, el también conservador, Rodrigo Maia.
La causa en contra de Calheiro se remonta a 2007 y es el primer proceso que el STF abre en contra del poderoso legislador, aunque enfrenta una docena de investigaciones, muchas de ellas relacionadas con el proceso sobre la enorme red de corrupción en Petrobras, cuya investigación trató, de hecho, de obstaculizar.
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