Durante el acto de protesta, pocas horas después de haber sido anunciados sus despidos, los trabajadores también cortaron el acceso de la avenida Alem, en la ciudad de Buenos Aires (capital), en la que se ubica el edificio de la citada Cartera, ya tomado.
"Hace mucho que nos venimos preparando para este escenario. Todo lo que fuimos avanzando en organización y participación apunta a dar una respuesta a la altura del desafío que se nos impone. Vamos a luchar para que no pase ningún despido en el Ministerio y no vamos a aflojar hasta conseguirlo", ha anunciado, en un comunicado, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), que participa en la movilización.
Hace mucho que nos venimos preparando para este escenario. Todo lo que fuimos avanzando en organización y participación apunta a dar una respuesta a la altura del desafío que se nos impone. Vamos a luchar para que no pase ningún despido en el Ministerio y no vamos a aflojar hasta conseguirlo", ha anunciado la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) de Argentina.
Al respecto, el delegado general de la ATE, Hernán Izurieta, ha advertido de que esa nueva ola de despidos del Gobierno del presidente, Mauricio Macri, no terminará con el caso del Ministerio de Trabajo, sino que llegará a más expulsiones en diferentes lugares del país suramericano.

Izurieta, además, ha lamentado que entre los empleados despedidos figuren varios trabajadores con más de 20 años de experiencia laboral solo en la referida institución, así como trabajadores recién incorporados. También ha hecho saber que la medida afectaría a algunas mujeres embarazadas.
De momento se desconoce el número exacto de los trabajadores despedidos de la citada institución, si bien algunos medios informan de que fueron unas 237 personas quienes recibieron el telegrama de expulsión.
Este acto de protesta se ha producido en la misma jornada en la que las centrales sindicales de Argentina protagonizan una huelga general en todo el país en protesta por la política laboral del Ejecutivo de Macri.
Tras adoptar una serie de “medidas reformistas” —en particular en el sector económico y laboral— una vez instalado en la Casa Rosada, el presidente argentino se enfrenta a las críticas y manifestaciones de rechazo de la nación argentina en su conjunto.
Según indica un estudio realizado por la consultora Tendencias Económicas, desde que Macri se hiciera con las riendas de Argentina, unos 108 mil trabajadores estatales a escala nacional, provincial y municipal han sido despedidos.
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