Colegios electorales de provincias como Giza, Alejandría o Fayoum abrieron sus puertas este domingo por la mañana, dando comienzo a la primera fase de las elecciones parlamentarias en Egipto. Los comicios llegan con un año de retraso, motivado por sucesivas sentencias de inconstitucionalidad dictadas contra la ley electoral. La apertura se ha desarrollado en medio de fuertes medidas de seguridad aunque sin grandes incidentes.
La tónica dominante ha sido la baja participación. Basándose en registros electrónicos el presidente del Alto Comité Electoral, Omar Marwan, informó de que el índice de concurrencia a las urnas rondaba el 2,3 % aunque poco después matizó que esa no era, necesariamente, la cifra correcta. Algunos de los egipcios que fueron llegando a los colegios de forma intermitente se encontraron asimismo con dificultades a la hora de votar.
Aunque no se han registrado incidentes de gravedad las violaciones de la ley electoral cometidas saltaban a la vista. La propaganda electoral no había sido retirada, partidarios de algunos candidatos hacían campaña en la puerta de los colegios e incluso pudo verse a un autobús empapelado con el rostro de un aspirante, que trasladaba a un grupo de electores.
La Alta Comisión Electoral de Egipto, ha anunciado multas de 500 libras (algo más de 50 euros) para quienes no ejerzan su derecho al voto en estas elecciones. Si bien este tipo de medidas rara vez llegan a aplicarse denota la voluntad de las autoridades de legitimarse mediante una alta participación en los comicios.
Rocío López, Guiza.
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