El criminal más buscado por México y Estados Unidos, Joaquín Guzmán, provocó las más severas críticas con el Gobierno de Enrique Peña Nieto, quizá aun más que la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
La fuga de ‘El Chapo’ Guzmán sacó a la vista de los medios de comunicación de decenas de países del mundo, la corrupción que hay en México, porque si en ella nadie se explica cómo salió el narcotraficante de una prisión de máxima seguridad.
Senadores de oposición demandan cambios de fondo en materia de seguridad, comenzando con fuertes sanciones para funcionarios corruptos y no solo los que trabajan en el sistema penitenciario.
Otros senadores del Partido de la Revolución Democrática (PRD) condenaron la desaparición de la Secretaría de Seguridad Pública y que las responsabilidades de esta institución hayan pasado a la Secretaría de Gobernación que históricamente solo tenía responsabilidades en materia política.
La fuga del chapo Guzmán puso en entredicho una vez más la credibilidad del gobierno federal que ya tenía severos problemas con Tlatlaya o la desaparición de los 43 de Ayotzinapa. Especialistas, investigadores y senadores de la República insisten en que se debe llegar a fondo en las responsabilidades a todos los niveles de gobierno.
Arturo Calvillo, Ciudad de México.
snf/mrk
