• El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina.
Publicada: martes, 19 de mayo de 2015 0:56

Pese al descontento popular, el presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, ha descartado este lunes renunciar a su cargo tras ser acusado de corrupción, y ha considerado que solo con unos "cambios de fondo" enfrentará este delito.

Yo tengo un mandato constitucional y estoy dispuesto a cumplirlo, ha afirmado el presidente de Guatemala, Pérez Molina.

"Yo tengo un mandato constitucional y estoy dispuesto a cumplirlo", ha afirmado Pérez Molina al tiempo que ha resaltado que la solución a la crisis institucional que vive el país no se superará cambiando al jefe de Estado.

También, ha afirmado que "si no se hacen cambios de fondo el sistema puede colapsar", y ha invitado a los sectores nacionales a presentar propuestas a fin de reestructurar el Estado.

Pérez Molina asegura haber tomado nota de las demandas exigidas durante las manifestaciones populares en las que los guatemaltecos han expresado tanto su rechazo a la corrupción, como han pedido su renuncia.

 

 

Desde hace dos semanas, Guatemala es escenario de masivas manifestaciones antigubernamentales en las que acusan a las autoridades, incluido el presidente, de permitir la extensión de la corrupción organizada en los sectores gubernamentales.

El 8 de mayo, la vicepresidenta, Roxana Baldetti, renunció a su cargo tras el destape de un caso de corrupción que envolvía a personas de su entorno. Los guatemaltecos  celebraron esta dimisión.

La exvicepresidenta de Guatemala, Roxana Baldetti

 

El sábado, un gran número de guatemaltecos se apoderó de las calles de nueve ciudades del país para volver a pedir la renuncia del presidente Pérez Molina, a quien acusan de corrupción.

 

Marcha de los ciudadanos guatemaltecos contra la corrupción en el Gobierno.

 

Por otra parte, una comisión del Congreso recientemente ha puesto en marcha un proceso de investigación sobre algunos titulares del país, entre ellos el ministro de Salud Pública y Asistencia Social, Luis Enrique Monterroso, por el supuesto cargo de mal manejo de medicamentos.

Los casos de corrupción saltaron a luz el pasado abril durante una investigación de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) que dejó al descubierto una red dedicada a la defraudación aduanera y el contrabando denominada "La Línea", encabezada por Carlos Monzón, el secretario privado de la exvicepresidenta.

Según analistas, las manifestaciones antigubernamentales en Guatemala han alcanzado niveles sin precedentes en la era democrática del país, sobre todo, en reacción al desgaste cada vez mayor del Gobierno bajo señalamientos de corrupción.

mpv/ncl/hnb