Según declaró el sábado el comandante de la Base de Defensa Antiaérea Jatam Al-Anbia del Ejército iraní, general de brigada Farzad Esmaili, el nuevo sistema se encuentra también equipado por nuevos radares de medio y largo alcance.
El comandante persa detalló además que dichos sistemas impedirán amenazas de una guerra electrónica tras incorporarse el 1 de septiembre a la red de la defensa aérea iraní.
También los radares de nuevos sistemas de defensa son capaces mantener bajo su vigilancia importantes áreas en el sur y sureste del territorio de Irán, aseveró el general de brigada Esmaili.
Según el alto comandante, uno de los radares que cuenta con un rango de alcance de unos 1000 kilómetros (620 millas) será instalado en una de las áreas estratégicas del territorio persa.
El pasado marzo, el mismo funcionario castrense aseguró que ya Irán es capaz de reconocer cualquier avión de espionaje que vuele muy lejos de sus fronteras con el fin de garantizar la integridad territorial de la República Islámica de Irán.
En los últimos años, Irán ha hecho grandes avances en el sector de defensiva y alcanzó la autosuficiencia en la producción de equipos y sistemas militares considerados esenciales para el sistema defensivo del país persa.
Teherán ha asegurado en reiteradas ocasiones, especialmente a sus vecinos de la región, que su doctrina defensiva se basa en la disuasión y que su poderío militar no representa ninguna amenaza para terceros países, en particular para sus vecinos.
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