El coordinador humanitario de la ONU para los territorios palestinos ocupados, Robert Piper, subrayó el martes en un comunicado que el derecho a la salud es “un derecho humano fundamental” que el régimen de Tel Aviv debe respetar y proteger siempre.
“Se trata de una conducta inaceptable, que no debe repetirse, porque limita la habilidad de los trabajadores de salud para cumplir su misión, violando las leyes internacionales”, advirtió Piper.
Las fuerzas del régimen de Israel irrumpieron a finales del pasado mes de octubre en el centro médico Al-Makassed en Al-Quds con el fin de arrestar a manifestantes palestinos heridos durante los enfrentamientos e internados en la sección de urgencias.
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