"Ellos necesitan una masiva solidaridad mundial en estos momentos duros. No podemos abandonarlos", asegura Ban ki-moon.
"Ellos necesitan una masiva solidaridad mundial en estos momentos duros. No podemos abandonarlos", asegura el máximo responsable de la ONU, Ban ki-moon, en la inauguración de un evento para celebrar los 65 años de la fundación de la Agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina en el Oriente Próximo (UNRWA).
Destacando la labor de la UNRWA a lo largo de más de seis décadas para reducir el sufrimiento de los palestinos, admite, sin embargo, que la existencia de la UNRWA es, en realidad, un símbolo del fracaso político y de la ausencia de una verdadera solución, justa y duradera, para la grave situación de los refugiados palestinos.
También instó a las autoridades del régimen israelí, de Palestina, y de todas las partes influyentes, que reanuden de inmediato los diálogos de paz y pongan fin a las acciones unilaterales que destruyen la confianza.
"El catastrófico desplazamiento de los palestinos de sus tierras—el Al-Nakba—fue un momento que definió la historia de Palestina y de las Naciones Unidas. Esta injusticia, que ya dura casi siete décadas, constituye una dolorosa herida en los corazones y la psique de nuestro pueblo, y se mantiene en el centro de la lucha palestina por la paz, la justicia y la libertad", según Ashrawi.
Por su parte, la veterana política de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Hanán Ashrawi, subrayó que más de 5,43 millones de palestinos son refugiados y es una situación que ya dura cuatro generaciones.
"El catastrófico desplazamiento de los palestinos de sus tierras—el Al-Nakba—fue un momento que definió la historia de Palestina y de las Naciones Unidas. Esta injusticia, que ya dura casi siete décadas, constituye una dolorosa herida en los corazones y la psique de nuestro pueblo, y se mantiene en el centro de la lucha palestina por la paz, la justicia y la libertad", se lamentó Ashrawi.
Cabe señalar que el pasado 26 de mayo, el canciller palestino, Riad al-Maliki, se mostró escéptico respecto a la anunciada disposición del primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, a reanudar los llamados diálogos de paz con los palestinos.
En su campaña electoral, Netanyahu prometió que si ganaba no habría Estado palestino, pues su gabinete incluye a ministros contrarios a que los palestinos tengan su propio país.
Los asentamientos israelíes son considerados ilegales por las Naciones Unidas y la mayoría de los países, porque los territorios fueron arrebatados a Palestina por el régimen de Tel Aviv en la llamada Guerra de los Seis Días (1967), y la Convención de Ginebra prohíbe construir en una zona bajo ocupación.
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