• Sede de la compañía Microsoft en el estado de Washington, EE.UU.
Publicada: jueves, 12 de noviembre de 2015 11:16

El grupo estadounidense Microsoft anunció el miércoles que almacenará los datos de sus clientes europeos en dos centros en Alemania supervisado por Deutsche Telekom.

La decisión responde a las inquietudes de alemanes y europeos sobre la privacidad de sus datos tras las revelaciones de espionaje informático a gran escala en Estados Unidos.

El nuevo centro de datos de Microsoft funcionará como una subsidiaria de Deutsche Telekom, la mayor operadora de Alemania, lo que interpondrá a una empresa local y a un gobierno a prueba del espionaje estadounidense ante las solicitudes de cualquier organismo ya sea un tribunal local, la NSA, la CIA o la FBI, según The Verge.

Según un reporte de The Verge que cita a otros medios incluyendo The Financial Times, el nuevo centro de datos de Microsoft funcionará como una subsidiaria de Deutsche Telekom, la mayor operadora de Alemania, lo que interpondrá a una empresa local y a un gobierno a prueba del espionaje estadounidense ante las solicitudes de cualquier organismo ya sea un tribunal local, la Agencia Nacional de Seguridad (NSA, en inglés), la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA, por sus siglas en inglés) o la Oficina Federal de Investigación de Estados Unidos (FBI, en inglés).

Mantener la confianza de los usuarios es fundamental y es lo que intenta demostrar Microsoft con esta decisión. Además, va en consonancia con una sentencia de octubre en la cual el Tribunal de Justicia Europeo invalidó el acuerdo que hasta ahora permitía la transferencia de datos europeos a servidores en EE.UU., una práctica común de todas las empresas estadounidenses, entre ellas Facebook, Google o Amazon, aunque según cálculos de The Wall Street Journal se verán afectadas más de 4500 compañías.

La situación se explica de forma sencilla con un ejemplo: actualmente Microsoft tiene una batalla legal con una corte de Nueva York, porque las autoridades estadounidenses demandan acceso a los correos electrónicos de un ciudadano estadounidense almacenados en un servidor de Irlanda, a lo cual se opone la empresa, y aunque todo parece indicar que perderá en este caso, colocar un centro de información en el país con la legislación de datos más dura de la región parece un claro mensaje al gobierno de EE.UU.

Mantener la confianza de los usuarios es fundamental y es lo que intenta demostrar Microsoft con la nueva decisión.

 

Este caso es similar al de los iPhone de Apple, a los cuales la empresa de Cupertino no tiene acceso puesto que la encriptación está en manos de los usuarios, lo que impide que el Gobierno de EE.UU. le pida a la empresa información almacenada en los mismos, porque hay una barrera que hasta ahora parece infranqueable.

Analistas de la firma Forrester dijeron a la fuente que aunque la jugada de Microsoft es inteligente, todavía falta probar la invulnerabilidad de los datos en los tribunales, es decir, esperar que se presente un caso y que el Gobierno alemán se oponga, rotundamente, a ceder a las presiones de EE.UU.

Las empresas tecnológicas de EE.UU. han pasado este año una crisis de desconfianza por temas de seguridad que las ha llevado hasta la Casa Blanca a pedirle al presidente Obama que la NSA cese la solicitud de información. Tim Cook, presidente ejecutivo de Apple, ha sido uno de los principales defensores de la "privacidad como derecho humano fundamental".

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