"Las cosas malas sucederán. Un montón de cosas malas sucederán (...) Habrá ataques que ustedes no creerían. Habrá ataques de las personas que ahora mismo, están entrando en nuestro país, no tengo ninguna duda en mi mente", ha dicho este domingo Trump en un programa radial.
El 11 de septiembre de 2001, el territorio norteamericano sufrió ataques terroristas sin precedentes, Nueva York, el Pentágono y Pensilvania, fueron lugares donde impactaron cuatro aviones de bandera estadounidense secuestrados en aquella jornada. Las autoridades estadounidenses afirman que los ataques fueron llevados a cabo por 19 terroristas del grupo Al-Qaeda, entre ellos 15 ciudadanos saudíes.
Habrá ataques que ustedes no creerían. Habrán ataques de las personas que ahora mismo, están entrando en nuestro país, no tengo ninguna duda en mi mente", dijo el presunto candidato republicano a la Presidencia de EE.UU., Donald Trump.
Con estas palabras, el magnate que anteriormente había pedido la prohibición de la entrada de todos los musulmanes y migrantes a EE.UU., ha arremetido contra los esfuerzos de la Administración del presidente Barack Obama para dar asilo a un mayor número de refugiados sirios que huye de la crisis en su país.
Ha insistido en que no se debe permitir que los refugiados sirios entren en EE.UU., y prometido que de ser elegido como presidente adoptará medidas muy estrictas al respecto.
"Nuestro país tiene bastante dificultad en este momento aún sin que haya dejado que los sirios entren, y además, no sabemos si son sirios. No sabemos de dónde vienen; No tenemos ninguna idea. Podrían ser EIIL. Pero nosotros lo vamos a detener inmediatamente", ha preciado Trump, justificando así su polémica postura antinmigrante.
Ha explicado que las personas que entran en EE.UU. están siendo apoyadas financieramente por el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe), cuyos miembros fueron entrenados inicialmente por la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU. (CIA, por sus siglas en inglés), en Jordania en 2012 para desestabilizar al Gobierno sirio. Ellos ahora controlan grandes partes de Irak y Siria.
El alargado conflicto sirio ha dejado hasta el momento más de 400.000 muertos y millones de desplazados dentro o fuera de las fronteras del país árabe.
La Administración de Obama ha planeado dar asilo a al menos 10.000 refugiados sirios hasta el final del año fiscal, pero hasta finales de abril sólo 1736 sirios pudieron llegar al territorio norteamericano.
Previamente, la Casa Blanca había denunciado la idea de Trump para boicotear la entrada de musulmanes a EE.UU., y había dicho que tal postura lo "descalifica" para que funja como presidente.
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