El ministro de Industria y Comercio yemení, Mohamed Sharaf al-Mutahhar, dijo el sábado que, aunque la importación de los productos suecos a Yemen es “limitada”, el Gobierno de Salvación Nacional decidió boicotear los bienes fabricados por Suecia, en señal de protesta por la blasfemia al sagrado Corán en Estocolmo, autorizada por las autoridades del país europeo.
Señaló que la prohibición de importación de los productos y transacción con empresas de Suecia era lo mínimo que podía hacer el Gobierno yemení, al tiempo que llamó a todos los países islámicos a hacer lo mismo, según informó la televisión local Al Masirah.
La reciente quema de un ejemplar del Corán frente a la mayor mezquita de Estocolmo, una flagrante ofensa a las santidades islámicas que se ha repetido muchas veces en Suecia, hirió los sentimientos de toda la comunidad musulmana y desató condenas generalizadas en el mundo, tanto por parte del mundo islámico, como la población y entidades no musulmanes.
Últimamente, se han multiplicado los llamamientos al boicot a los productos y empresas suecas en el mundo musulmán como Marruecos, Pakistán, Irak, Irán, Omán y Yemen en protesta por la profanación al Corán, después de que la Universidad de Al-Azhar, el centro de estudios islámicos más prestigioso del mundo, urgiera a los 1500 millones de musulmanes de todo el mundo a boicotear los productos suecos.
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