“Las autoridades pertinentes están trabajando para que Turquía no se vea afectada negativamente por las medidas impuestas por Estados Unidos contra Irán”, ha anunciado el Ministerio turco de Asuntos Exteriores en un comunicado publicado este viernes.
La Cancillería turca ha insistido en que Irán es un vecino importante no solo por las relaciones de larga data, sino por la relevancia de las relaciones económicas y comerciales entre ambos países.
El anuncio se ha difundido luego de que una delegación de funcionarios de los Departamentos de Estado y del Tesoro de Estados Unidos sostuvo conversaciones con las autoridades turcas en Ankara (la capital) sobre las próximas restricciones que Washington impondrá contra Teherán.
Las autoridades pertinentes están trabajando para que Turquía no se vea afectada negativamente por las medidas impuestas por Estados Unidos contra Irán”, ha anunciado el Ministerio de Asuntos Exteriores turco.
El presidente estadounidense, Donald Trump, retiró el 8 de mayo a su país del acuerdo nuclear suscrito en 2015 por Irán y el entonces Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Rusia, Francia y China, más Alemania), además prometió restaurar los embargos contra el país persa, los mismos que habían sido levantados en el marco del pacto nuclear, y amenazó con imponer las “sanciones más duras de la historia” contra la República Islámica.
Pese al anuncio de Trump, muchos países del mundo han aseverado que mantendrán sus relaciones económicas con Irán, entre ellos Turquía, Rusia y China.
Moscú ha asegurado que seguirá comerciando con Irán y que esto no figura en el rango de los asuntos a la espera de la decisión la Casa Blanca.
Por su parte, el Gobierno de China ha ratificado a Irán como un “socio importante” con el que seguirá cooperando en las áreas económica y comercial, pese a los embargos estadounidenses.
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