Ryanair, la aerolínea irlandesa más grande de Europa por pasajeros, que el año pasado acordó reconocer a los sindicatos, por primera vez en sus 30 años de historia, se enfrenta a crecientes protestas de los sindicalistas, frustrados por el lento progreso en las negociaciones sobre los convenios laborales colectivos.
La nueva jornada de huelgas seguirá a las recientes que se vivieron en Italia, Bélgica, España y Portugal, en la última semana de julio. De tal modo, habrá un total de poco menos de 400 vuelos cancelados debido a las convocatorias de pilotos en Alemania, Irlanda, Bélgica y Suecia, lo cual será el 17 % de los más de 2400 vuelos previstos en toda Europa para el viernes. Mientras tanto, el sindicato de pilotos holandeses VNV, también está considerando convocar a huelgas para el viernes.
Los sindicatos han dado a Ryaniar un plazo hasta el lunes para resolver disputas sobre mejoras en condiciones salariales y laborales. La compañía opera más de 2000 vuelos por día, prestando servicios a 223 aeropuertos en 37 países de Europa y el norte de África.
Debido a su modelo de bajo costo, Ryanair no quiere aumentar los salarios para preservar su rentabilidad ante los clientes y así, ha amenazado con recortar empleos y aviones si los paros perjudican a su negocio.
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