Un miembro de la expedición que incluía a los dos fallecidos, José Morillas, en unas palabras duras, afirmó: "El Gobierno español y marroquí han matado a José Antonio (el segundo muerto)".
"Si el día que dimos la voz de alarma sobrevuela un helicóptero, el fallecido no estaría muerto", acusó el domingo, antes de conocerse que había una segunda víctima, Juan Rengel, otro miembro de la expedición.
Mientras tanto, el jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, prefirió en cambio quedarse "con la buena voluntad y el afán de colaboración" de las autoridades marroquíes. "Han hecho un gran esfuerzo" en un rescate dificultado por la orografía del terreno, afirmó.
De los tres hombres, cuya desaparición fue señalada el martes por su seis compañeros de expedición a las montañas del Atlas, sólo uno sobrevivió, Juan Bolívar, un policía de 27 años cuyo "estado de salud es bueno", informó el lunes una fuente oficial marroquí.
Las autoridades anunciaron el sábado la muerte de Gustavo Virues, un abogado de 41 años, y el domingo, el Ministerio del Interior español anunciaba el fallecimiento de la segunda víctima, José Antonio Martínez que había sufrido fracturas en las piernas y un golpe en la cabeza, pero de la que se esperaba que saliera con vida.
En cuanto se supo del accidente el viernes, España anunció su disposición a enviar socorristas, que sólo pudieron actuar el domingo.
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