“Estamos profundamente indignados por este cínico acto que provocó la muerte de una persona y está dirigido contra los observadores internacionales que trabajan para restaurar la paz”, ha declarado este domingo el Ministerio ruso de Exteriores a través de un comunicado.
Así se ha referido a la explosión de un automóvil de la Misión Especial de Observación de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) en Ucrania. El incidente se ha saldado con un muerto —el observador estadounidense del organismo— y otros dos heridos.
Estamos profundamente indignados por este cínico acto que provocó la muerte de una persona y está dirigido contra los observadores internacionales que trabajan para restaurar la paz”, según el comunicado de la Cancillería rusa.
Los detalles del incidente están bajo investigación, pero la OSCE ha confirmado que una patrulla de seis personas que se desplazaban en dos vehículos blindados recibió de lleno la explosión de una mina en las inmediaciones de Prishib, un área de la provincia de Lugansk en la línea de contacto entre territorio ucraniano y zona separatista.
La nota de la Cancillería rusa tacha lo ocurrido de una “provocación” contra el proceso de paz y el alto al fuego en la región de Donbás. Por lo tanto, ha llamado a realizar una “investigación minuciosa y objetiva”.
The circumstances of @OSCE_SMM car explosion in #Donbass indicate a high probability of a provocation https://t.co/qHPCZiXkr9#Ukraine pic.twitter.com/3o3YFinoCU
— MFA Russia 🇷🇺 (@mfa_russia) April 23, 2017
Además de poner énfasis en que el suceso demuestra la necesidad de garantizar la seguridad de los observadores de la referida organización, la mencionada Cartera rusa ha urgido a iniciar diálogos directos entre las partes del conflicto, es decir “Kiev, Donetsk y Lugansk”.
A su vez, las milicias de Lugansk, mediante un comunicado, han anunciado que el equipo de la OSCE se habría desviado de la ruta habitual a una carretera secundaria: “Este equipo se desvió de la ruta principal y se movió por carreteras secundarias, lo cual está prohibido por el mandato de la OSCE”.
Se trata de la primera víctima mortal que la Misión Especial de Observación (SMM, por sus siglas en inglés) registra desde que fue desplegada en Ucrania en 2014 tras el estallido de los conflictos entre los independentistas del este y las fuerzas de Kiev.
En 2015, se alcanzó un acuerdo de alto el fuego de Minsk tras una serie de negociaciones celebradas entre las autoridades de Rusia, Ucrania, Francia y Alemania. Sin embargo, los puntos del pacto han sido violados en reiteradas ocasiones. Cada parte se acusa mutuamente de avivar las tensiones.
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