Un gran número de habitantes de Isfahán y de ciudades adyacentes se ha personado este domingo en la ceremonia luctuosa y el funeral de las tres víctimas mortales del atentado terrorista en la histórica urbe iraní.
Según las imágenes difundidas en directo por el canal de la televisión IRINN, la multitud enlutada ha rechazado el ataque y reiterado su lealtad a la Revolución Islámica y el Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamanei.
Con la bandera iraní en sus manos, los participantes han coreado consignas para decir a los vándalos, terroristas y sus patrocinadores que el complot de los enemigos contra la República Islámica fracasará.
Similares ceremonias se han realizado la misma jornada en las ciudades de Mashhad (noreste), Sanandaj (oeste), Urmia (noroeste) y Shiraz (sur), donde los alborotadores han ultimado a los agentes del orden y civiles desarmados en acciones crueles y violentas.
¿Qué sucede en Irán?
Se intensifica la guerra híbrida contra Irán, ahora con episodios trágicos y sangrientos. Tras la masacre de Shiraz, la semana pasada los vándalos y terroristas, en tres días, derramaron la sangre de más de 22 iraníes en diferentes partes del país.
Todo esto sucedió luego de que los medios antiraníes, la mayoría con sede en Europa y EE.UU., dedicaron toda su agenda informativa a instigar a la nación iraní a salir a las calles para celebrar marchas antisistemas en todo el país durante los tres días, a partir del pasado martes. A pesar de masivas propagandas, ninguna congregación se registró en dichos días en Irán.
Efectivamente, los analistas consideran que el hecho de recurrir al terrorismo por parte de los cerebros del guion que busca desestabilizar el país persa, evidencia el fracaso del plan de popularizar los disturbios.
mrg/ctl/