Vizcarra fue enviado a prisión preventiva por presunta corrupción, uniéndose en el penal de Barbadillo a los también expresidentes Pedro Castillo, Alejandro Toledo y Ollanta Humala. Su detención refuerza la percepción internacional de un Perú con inestabilidad política y problemas institucionales.
Durante su última audiencia, Martín Vizcarra, afirmó su inocencia y confía en que se anule su prisión preventiva por los casos “Lomas de Ilo” y “Hospital Regional de Moquegua”.
Julio Velarde, presidente del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), afirmó que la detención de expresidentes daña la imagen internacional del país.
Desde su destitución en 2020, Vizcarra relanzó su perfil político con miras al 2026: fortaleció su presencia en redes, postuló al Congreso en 2021 y fue el candidato más votado, pero fue inhabilitado por diez años.
Aarón Rodríguez, Lima.
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