Sin embargo, en las últimas semanas dos presuntos actos de corrupción ligados a su gabinete ministerial empiezan a derrumbar el mito.
El gabinete presidido por Vicente Zeballos no tiene ni 50 días en funciones y ya afrontó su primera gran crisis; la renuncia de 2 ministros en menos de tres semanas por presuntos actos de corrupción.
Esta situación ha puesto en jaque al Gobierno de Martín Vizcarra, pues la imagen de estado anticorrupción que se formó tras el cierre del Congreso empieza a disolverse.
Jorge Meléndez, quien se desempeñó como ministro de Desarrollo e Inclusión Social hasta el 27 de octubre fue acusado de favorecer a varias mafias encargadas de la extracción de madera ilegal del Amazonas.
Por su parte Zulema Tomas es acusada de nepotismo y tras su renuncia del pasado 15 de noviembre, fue sucedida este lunes en el cargo por Elizabeth Hinostroza.
Para la excongresista e integrante de la comisión permanente Indira Huilca, los constantes cambios de ministros en esta cartera han afectado las políticas de salud pública que pretender ayudar a los más necesitados.
Pese a que fue cuestionado por recibir sobornos en la entrega de la adenda de la construcción de un aeropuerto durante su gestión como ministro de Transportes, desde que asumió el cargo de presidente de la república, Martín Vizcarra se aseguró de marcar distancia de los actos de corrupción del Congreso hasta su cierre el pasado 30 de septiembre.
En aquella oportunidad su popularidad subió hasta el 79 %, cifra pocas veces vista en un presidente peruano.
Los presuntos actos de corrupción vinculados a los ministros de Salud y Desarrollo e Inclusión Social provocaron una caída en la aprobación del presidente Vizcarra de 19 puntos en la última encuesta nacional, pese a ello continúa gozando de la popularidad del 60 % de la población, según una encuesta de Ipsos Perú.
Aaron Rodríguez, Lima.
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