Uno de los asistentes notables, el veterano del movimiento republicano irlandés Gerry Adams, líder histórico del partido irlandés Sinn Féinn, ha pedido liderazgo y una solución para los presos de ETA.
Sin embargo, el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, no cree lo mismo. Rajoy ha asegurado que los crímenes de ETA se seguirán investigando, antes de insistir una vez más en que no habrá ninguna impunidad.
De los casi 300 prisioneros de ETA, unos 250 se encuentran en España y los restantes en Francia. Se les aplica el primer grado penitenciario, el más restrictivo, que corresponde a los reclusos más peligrosos.
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