Pelosi ha asegurado a través de un comunicado publicado este viernes que el Partido Demócrata presentará cargos contra el todavía mandatario del país por sus actos “sediciosos y peligrosos”.
“Hoy, tras los actos peligrosos y sediciosos del presidente, los republicanos en el Congreso necesitan seguir ese ejemplo y solicitar que Trump deje su puesto, de forma inmediata. Si el presidente no deja su puesto de forma inmediata y voluntaria, el Congreso procederá con nuestra acción”, ha expresado Pelosi en una carta enviada a ambos partidos.
La líder demócrata, cuya oficina fue invadida en el asalto al Capitolio el miércoles, también ha consultado al jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, el general Mark A. Milley, cómo “prevenir que un presidente inestable inicie hostilidades militares o acceda a los códigos nucleares”.
La presión para expulsar a Trump de la Casa Blanca no mengua, pese que él deberá abandonar el poder en unos once días, tras perder los comicios del pasado noviembre.
Previamente, Pelosi exigió al vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, invocar la Enmienda 25 de la Constitución para apartar al presidente de su cargo. Todavía se espera una respuesta.
Muchos senadores y congresistas, tanto demócratas como republicanos, culparon al presidente del caos ocurrido el miércoles en el edificio del Congreso, e incluso los miembros del Gabinete de Trump debatieron la posibilidad de destituir al mandatario.
Los líderes mundiales han expresado su preocupación ante los hechos en el país norteamericano. China ha comparado el asalto al Capitolio con las protestas en Hong Kong, mientras Rusia e Irán han manifestado que el evento mostró la debilidad de la democracia occidental. Los aliados europeos de Washington, asimismo, han criticado la incitación a la violencia por Trump como “un asalto a la democracia”.
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