Expertos sostienen que el diálogo entre el Estado de Chile y determinadas comunidades mapuche, debe fluir sin la militarización de La Araucanía.
La militarización de la región más pobre de Chile, junto a la violencia anónima, buscan estigmatizar a las comunidades indígenas, las que se ven perjudicadas por estos dos factores.
La capacitación lectiva en memoria histórica es una opción viable para evitar recaídas en regímenes totalitarios neoliberales que puedan asolar Latinoamérica nuevamente.
Los recientes diálogos de paz en Colombia podrían servir de referencia para Chile, sin embargo, la represión estatal espanta las conversaciones.
Paz y militarización jamás han ido de la mano, menos cuando se pretende buscar el diálogo para una solución consensuada en el sur chileno.
Manuel Arismendi, Temuco.
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