Según la agencia española de noticias Efe, el cadáver de un hombre yacía carbonizado en plena calle, bajo el chasis de su motocicleta todavía en llamas, en la zona de Delmas, en Puerto Príncipe, la capital de Haití.
Conforme a testigos consultados por medios locales, el individuo fue baleado por un miembro de una banda armada, supuestamente favorable al Gobierno de Moise.
Un reciente informe de la Organización de Naciones Unidas (ONU) denunció que la violencia en las manifestaciones está vinculada a bandas pagadas tanto por el Gobierno como por la oposición.
Los haitianos exigen la renuncia del mandatario por haber incumplido sus promesas y no haber solucionado la severa crisis económica y la pobreza que aquejan a la nación caribeña. Además, conforme a la oposición, Moise ya terminó el pasado 7 de febrero su mandato, por lo que debe abandonar el poder para dar paso a la instalación de una administración transitoria.
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