La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) fue uno de los primeros bloques regionales en condenar el intento de asesinato contra Fernández, a quien un hombre intentó el jueves disparar con una pistola cuando ella saludaba a militantes y seguidores en la puerta de su domicilio en Buenos Aires (capital).
El secretario ejecutivo de ALBA-TCP, Sacha Llorenti, repudió el viernes en su cuenta en Twitter, “esos terribles hechos” y expresó su solidaridad con todo el pueblo argentino. “El odio no vencerá”, subrayó.
A su vez, la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) de Venezuela condenó en los términos más enérgicos el “magnicidio frustrado” contra la presidenta del Senado argentino, y dijo que el suceso vulnera “los principios más elementales de las sociedades democráticas y persigue evidentemente atentar contra la paz del hermano pueblo argentino”.
Intento de magnicidio es parte de la persecución judicial contra Fernández
Mediante un comunicado emitido el viernes, la AN dijo que ese “abominable” incidente es parte de una “persecución judicial con fines políticos en perjuicio de Cristina Fernández, por parte de actores del sistema de justicia que carecen de autonomía, imparcialidad e independencia”.
El texto avisa que los que dirigen la persecución judicial contra Fernández “desarrollan con descaro una agenda intervencionista en contra de la democracia y soberanía argentina”.
Desde Nicaragua también llegó un mensaje de solidaridad firmado por el presidente, Daniel Ortega, y su vicepresidenta, Rosario Murillo, quienes expresaron su firme solidaridad a Cristina y al jefe de Estado argentino, Alberto Fernández.
Honduras y Panamá fueron otras dos naciones centroamericanas en condenar el fallido intento de magnicidio. La presidenta hondureña, Xiomara Castro, envió el viernes un “mensaje de respaldo para Cristina y el pueblo argentino”, mientras que el Gobierno de Panamá se solidarizó con la vicepresidenta argentina.
Paraguay, el vecino norteño de Argentina, también alzó su voz contra este acto criminal, cuando su presidente, Mario Abdo Benítez, envió un mensaje de solidaridad a la expresidenta argentina (2007-2015). “Nos unimos a todas las voces que repudian la violencia y exigen justicia”, dijo el mandatario paraguayo en su cuenta de Twitter.
La Policía Federal del país austral ha detenido al asaltante de nacionalidad brasileña, identificado como Andrés Sabag Montiel, y ha encontrado 100 balas calibre 9 milímetros en un registro que ha realizado en su vivienda. El hombre es seguidor de grupos de odio y de páginas en defensa de “órdenes masónicas” o religiones paganas.
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