Una investigación llevada a cabo por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus siglas en inglés) desvela que el actual ministro de Energía de Argentina integró los directorios de al menos dos empresas ‘offshore’, una de las cuales se benefició con varias licitaciones en 2016, publica este martes el diario argentino La Nación.
El rotativo especifica que Aranguren fue en 2003 director de Shell Western Supply and Trading Ltd, una subsidiaria con sede en Barbados que la petrolera angloholandesa Royal Dutch Shell “utiliza para sus operaciones en América Latina”.
En ese mismo sentido, la periodista argentina Mariel Fitz Patrick, integrante del ICIJ, asegura que “la firma ‘offshore’, que se encontraba bajo la dirección de Aranguren, fue contratada por el Estado argentino en al menos 13 oportunidades durante los últimos años para la compra de gasoil. Ese negocio le reportó ganancias escandalosas por más de 240 millones de dólares durante su gestión como ministro responsable del área”, explicó.
Aranguren defendió su actuación y remarcó que nunca tomó una decisión que beneficiara de manera particular a Shell —sustentando sus argumentos con documentos oficiales— y justificó la operatoria ‘offshore’ cuando de multinacionales se trata.
Una sociedad ‘offshore’ es una compañía no declarada, cuya característica principal es que están registradas en un paraíso fiscal.
(...) la firma ‘offshore’, que se encontraba bajo la dirección de Aranguren, fue contratada por el Estado argentino en al menos 13 oportunidades durante los últimos años para la compra de gasoil. Ese negocio le reportó ganancias escandalosas por más de 240 millones de dólares durante su gestión como ministro responsable del área”, explicó la periodista argentina Mariel Fitz Patrick, integrante del ICIJ.
Comunicado de Unidad Ciudadana https://t.co/Nts0V8wUea
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) November 7, 2017
Más allá de esa coincidencia, sin embargo, Aranguren quedó fuera de toda sospecha tras dos informes de la Oficina Anticorrupción (OA), que depende del Ejecutivo, y de la Sindicatura General de la Nación (Sigen). Ambos separaron al funcionario de un eventual conflicto de interés o una violación de la Ley de Ética Pública.
Aranguren no es el único ministro del Gobierno del presidente Mauricio Macri que está vinculado a los llamados papeles del paraíso. Antes se reveló que el ministro de Finanzas, Luis Caputo, figuró como administrador de dos fondos de inversión desde 2009 hasta 2015, año en que asumió la función pública como secretario de Finanzas del actual Ejecutivo, antes de ser nombrado ministro de la misma cartera en enero de 2017.
Después de que se difundieran los nombres de las personas que están involucradas en los papeles del paraíso, desde Unidad Ciudadana, la plataforma creada por la senadora electa Cristina Fernández de Kirchner, pidieron la renuncia del ministro de Energía.
Con 13,4 millones de documentos desvelados, los papeles del paraíso constituyen la mayor filtración de documentos, que involucran a gran número de personalidades y a algunos presidentes, y supera en dos millones los archivos dados a conocer en 2015 por los llamados “papeles de Panamá”.
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