Según una de sus abogadas, Al-Qiq podría sufrir un ataque cardíaco en cualquier momento. Explicó que el palestino tiene dolores en el pecho y apenas puede hablar.
Esto tras más de 76 días en huelga de hambre en protesta contra su detención administrativa por parte del régimen israelí.
Aunque el régimen de Tel Aviv suspendió la detención del periodista, su abogada asegura que se trata de una medida falsa.
El analista internacional Luis José Fernández aborda el tema desde Madrid, capital española, en una entrevista con HispanTV.
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