10 minutos: Hong Kong y guerra comercial

Durante meses, la Administración de Donald Trump consideró los disturbios de Hong Kong un asunto interno de China.

La Casa Blanca prefirió no involucrarse en el tema hasta agosto, tres meses después de que estallaran las protestas en Hong Kong, cuando el presidente de Estados Unidos empezó a vincular el manejo pacífico de las manifestaciones con un acuerdo comercial con China, tratando de usar el caso como moneda de cambio en sus conversaciones comerciales.

Por su parte, China ha recordado continuamente a Washington que cualquier intento de utilizar el tema de Hong Kong como moneda de cambio fracasará.

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