• El líder del movimiento popular yemení Ansarolá, Abdul-Malik al-Houthi.
Publicada: viernes, 3 de julio de 2015 2:09

El líder del movimiento popular yemení Ansarolá, Abdul-Malik al-Houthi, ha calificado este jueves a Arabia Saudí como un "títere" en manos de EE.UU. y el régimen de Israel.

Arabia Saudí “es el cuerno de Satán y un servidor de Estados Unidos e Israel; además de un títere en sus manos que busca destruir nuestro país”, ha denunciado Al-Houthi en un discurso emitido por la cadena televisiva yemení Al-Masirah.

Arabia Saudí “es el cuerno de Satán y un servidor de Estados Unidos e Israel; además de un títere en sus manos que busca destruir nuestro país”, denuncia Al-Houthi.

En este sentido, ha afirmado que el régimen de Israel está jugando un papel importante en los ataques aéreos saudíes contra el territorio yemení.

El líder de Ansarolá, también, ha llamado a las fuerzas del Ejército yemení y los comités populares a mantenerse unidos para resistir ante “las potencias criminales y agresoras”.

“Esta es una batalla por la libertad. Yemen nunca será vencido y el enemigo fracasará en sus esfuerzos para esclavizar el pueblo”, ha resaltado.

Arabia Saudí lanzó una ofensiva militar contra Yemen con el visto bueno de Estados Unidos, prescindiendo del permiso de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en un intento por eliminar de la ecuación a Ansarolá y restaurar en el poder al expresidente fugitivo Abdu Rabu Mansur Hadi, un estrecho aliado de Riad.

Sin embargo, el régimen de Al Saud pese a recurrir a todo tipo de medidas, incluido el uso de bombas de racimo y de fósforo blanco, en sus ataques a Yemen, no ha logrado ninguno de sus objetivos principales: eliminar a Ansarolá y restaurar en el poder Mansur Hadi.

Yemeníes cavan tumbas para enterrar a las víctimas de los ataques aéreos saudíes.

 

El miércoles, las Naciones Unidas declaró el máximo nivel de emergencia humanitaria en Yemen, donde según las cifras de la ONU, al menos 2800 personas han muerto como consecuencia de la escalada de enfrentamientos tras la agresión saudí.

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