La ANC comenzará a sesionar este viernes en el mismo lugar que ocupaba la Asamblea Nacional (AN) de mayoría opositora. Más de dos meses de violencia para detener la iniciativa no alcanzaron para consumar los planes de la oposición de salir del presidente Nicolás Maduro. Pero el discurso opositor no baja de tono.
Así lucía la movilización opositora el último lunes. Muy lejos de las grandes concentraciones de hace dos meses atrás. En la semana también se revocó el arresto domiciliario a dos referentes de ese sector: Leopoldo López y Antonio Ledezma. Ni eso bastó para volver a movilizar a la oposición. En cambio, recrudeció la presión exterior, especialmente desde los Estados Unidos. El chavismo, respondió.
Desde la Casa Blanca, amenazaron con más sanciones, algunas contra la economía del país, y también blindaron el lenguaje contra el Gobierno de Venezuela.
Así se refirió la nueva vocera de la Casa Blanca a la detención de López y Ledezma, mientras otros países de Europa y América Latina también tomaban medidas, por ahora tibias, como la suspensión de vuelos hacia Caracas.
Para el analista también fue central que en estos meses no se haya logrado separar a la base del chavismo del Gobierno de Maduro, pero advirtió que para los bolivarianos también comienza una nueva etapa.
Estas posibles nuevas sanciones contra Venezuela recibirán aquí la misma respuesta que las anteriores: un rechazo rotundo desde el chavismo, y también desde las Fuerzas Armadas, que han reiterado su lealtad incondicional para con el presidente Maduro.
Marcos Salgado, Caracas.
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