• Senado de los Estados Unidos.
Publicada: viernes, 15 de julio de 2016 17:43
Actualizada: miércoles, 26 de abril de 2017 9:56

Un grupo de senadores de EE.UU. impulsa una resolución de apoyo a un referendo en Venezuela, dentro de otra campaña de desestabilización.

El Senado pide al Gobierno de Venezuela y a sus fuerzas de seguridad que respeten la Constitución, incluido el artículo que otorga a los ciudadanos venezolanos el derecho de impulsar un referéndum revocatorio contra su presidente (Nicolás Maduro) este año, si así lo consideran”, reza el texto preparado el jueves por un grupo de al menos nueve senadores estadounidenses.

Los firmantes son los senadores demócratas Tim Kaine (exgobernador del estado oriental de Virginia), Dick Durbin (del estado de Illinois, en el centro-este), Ben Cardin (del estado oriental de Maryland), Bob Menendez (del estado nororiental de Nueva Jersey), Bill Nelson (del estado suroriental de Florida) y Barbara Boxer (del estado occidental de California), así como los republicanos Marco Rubio (de Florida), Cory Gardner (del estado de Colorado, centro-oeste) y Mark Kirk (de Illinois).

El Senado pide al Gobierno de Venezuela y a sus fuerzas de seguridad que respeten la Constitución, incluido el artículo que otorga a los ciudadanos venezolanos el derecho de impulsar un referéndum revocatorio contra su presidente (Nicolás Maduro) este año, si así lo consideran”, reza el texto preparado el jueves por un grupo de al menos nueve senadores estadounidenses.

El senador Rubio ha emitido además un comunicado en el que exige “la liberación inmediata de los presos políticos” y achaca la situación actual a la “incompetencia" de Maduro para gobernar el país.

En referencia al termino “presos políticos” utilizado por Washington y la oposición, las autoridades venezolanas han aclarado que los presos no lo son por motivos políticos —incluido Leopoldo López, hallado violador de los principios de la Carta Magna venezolana—.

López está acusado de conspirar y provocar violencia en las protestas antigubernamentales de 2014 en algunas ciudades venezolanas, especialmente en Caracas (capital), y ello con respaldo extranjero —en particular de Estados Unidos—, con el fin de llevar a cabo un golpe de Estado.

Rubio, que ha sido aspirante presidencial republicano, también exige al presidente estadounidense, Barack Obama, que aplique las sanciones contra el país suramericano aprobadas recientemente en el Congreso de EE.UU.

Por su parte, el vicepresidente del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, ha precisado esta semana que no va a haber referéndum en Venezuela en el año en curso.

 

Maduro ha asegurado en reiteradas ocasiones que Washington utiliza todo su poder para estancar y destruir la Revolución Bolivariana de Venezuela.

Esta nueva divergencia entre Caracas y Washington hace más tensas sus relaciones, que se han ido deteriorando desde 2010, con el cierre de  las embajadas, y que llegó a un nivel crítico en marzo de 2015, cuando Obama firmó un decreto que señala a Venezuela como "amenaza inusual y extraordinaria" para la seguridad de Estados Unidos.

alg/mla/hnb