El terrorismo no distingue entre países, sectas o grupos políticos y sociales. Todos están al alcance de sus rencores y sus malas intenciones, de manera que los únicos que sacan provecho del terrorismo son el enemigo sionista y las grandes potencias mundiales.
“Este crimen es un eslabón de la cadena de los crímenes terroristas que tienen como blanco a la humanidad, las santidades, las herencias culturales, la seguridad y la estabilidad”, reza el comunicado de Hezbolá.
Luego de condenar energéticamente ese atentado en el que murieron 19 personas y otras 44 resultaron heridas, Hezbolá asegura que el objetivo de este acto violento ha sido dañar la imagen del Islam y la unidad de la comunidad musulmana.
De acuerdo con la nota, el terrorismo no distingue entre países, sectas o grupos políticos y sociales. Todos están al alcance de sus rencores y sus malas intenciones, de manera que los únicos que sacan provecho de ese terrorismo son el enemigo sionista y las grandes potencias mundiales.
“Todos los países, partidos, instituciones, fuerzas dinámicas de ulemas, pensadores y naciones, tanto en el mundo árabe e islámico como en otros países deben colocarse en una misma fila y hacer frente el terrorismo takfirí y sus crímenes en todos los sectores, legislativo, político y mediático”, entre otros, afirma Hezbolá.
Al final, Hezbola trasmite su pésame al Gobierno y a la nación hermana de Túnez, y en especial a las familias de las víctimas del ataque terrorista reivindicado por el grupo terrorista takfirí EIIL (Daesh, en árabe).
La tarde del miércoles, hombres armados atacaron contra el Museo del Bardo, y según ha confirmado el prime ministro tunecino, Habib Essid, al menos 19 personas, entre ellas 17 turistas extranjeros, perdieron la vida y otras 44 resultaron heridas, algunas de gravedad.
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