“Informado de la posible situación de secuestro de un vuelo interno de Libia desviado hacia Malta. Seguridad y operaciones de emergencia preparadas”, ha escrito este viernes el primer ministro maltés, Joseph Muscat, en su cuenta de Twitter.
Las autoridades maltesas han informado de que en el aparato viajaban 111 pasajeros y siete miembros de la tripulación. Entre los viajeros había 82 hombres, 28 mujeres y un niño. El avión, un Airbus A320 de la compañía estatal Afriqiyah Airways, salió de la ciudad suroccidental de Sebha a las 10.10 horas de la mañana (hora local) en dirección a Trípoli, la capital libia.
Informado de la posible situación de secuestro de un vuelo interno de Libia desviado hacia Malta. Seguridad y operaciones de emergencia preparadas”, ha dicho el primer ministro maltés, Joseph Muscat.
La autoridad aeroportuaria de Malta ha comunicado el envío de todos los equipos de emergencia al lugar de lo que describió como una “interferencia ilegal” en la pista del aeropuerto.
El avión ha sido visto en la pista asfaltada rodeada por vehículos militares y todos los vuelos han sido cancelados.
Dos supuestos secuestradores han amenazado con hacer estallar el avión, según la televisión maltesa TVM. Por su parte, el diario local Times of Malta solo habla de un secuestrador que dice estar en posesión de una granada de mano y que se ha proclamado partidario del fallecido dictador libio Muamar Gadafi.
Por otra parte, fuentes gubernamentales maltesas han dicho a la agencia francés de noticia AFP que había un solo secuestrador a bordo del avión, que ha dicho a la tripulación tener una granada. El secuestrador también ha dicho que liberará a los pasajeros si sus demandas son aceptadas.
Libia se encuentra sumida en el caos desde el derrocamiento de Muamar Gadafi en 2011 por las fuerzas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), que dejaron el país con milicianos luchando en distintas partes del mismo.
El Consejo Presidencial de Libia anunció el marzo la formación de un Gobierno del Acuerdo Nacional (GNA, en inglés) para unir a las facciones beligerantes del país bajo un plan respaldado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Las fuerzas leales al GNA consiguieron tomar en diciembre el control de la ciudad costera de Sirte, bastión del grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) desde junio de 2015.
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