Los vuelos hacia o desde el aeropuerto Gatwick de Londres, la capital británica, han sido desviados o se quedaron en tierra después de que se vieran dos drones (aviones no tripulados) cerca de la pista. En este sentido se suspendieron todos los vuelos.
Por el momento, la Policía británica investiga un posible “acto deliberado” con el fin de cerrar el aeropuerto, aunque se descarta la hipótesis de un atentado terrorista. En el Reino Unido es ilegal volar drones en un radio de un kilómetro alrededor de un aeropuerto y a una altura mayor a 120 metros.
En total, 20 policías se encontraban abocados a la búsqueda del operador o los operadores de los drones y se ha pedido ayuda al público en general para proveer información.
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