• --
Publicada: viernes, 10 de octubre de 2014 15:24
Actualizada: jueves, 10 de diciembre de 2015 9:39

Los padres del periodista estadounidense James Foley, decapitado por el grupo takfirí EIIL (Daesh, en árabe) en Siria, han afirmado este viernes que si Estados Unidos y los otros países quieren salvar a sus ciudadanos rehenes en manos de esa banda terrorista, tienen que negociar “tarde o temprano” con ellos. En una entrevista concedida a la emisora francesa ‘Europa 1’, John Foley, padre del periodista decapitado ha rememorado que “esta situación no va a solucionarse con intervenciones militares, por tanto, tarde o temprano, habrá que hablar”. Al apuntar que resulta “difícil” dar a conocer si el pago de un rescate hubiera permitido salvar a su hijo, John Foley señaló que “en todo caso no costaba nada negociar, tratar de iniciar conversaciones” con el EIIL. Por su parte, Diane Foley, madre de la víctima, ha apuntado que esta situación conllevaría a “nuestro país y a otros a reexaminar las políticas que se aplican en materia de negociación, especialmente con los terroristas”. “Esa gente necesita ser comprendida (…) Creo que debemos hablar con ellos, debemos estudiarlos”, ha acotado Diane Foley, para después considerar que Washington “hizo lo que pudo” en la búsqueda de un medio que coadyuvara en la libertad de su hijo, primer rehén occidental decapitado por el EIIL. Sin embargo, Washington se negó siempre a pagar rescates para obtener la liberación de rehenes, y Diane Foley afirmó el mes pasado que tuvo la impresión de que los esfuerzos de la familia para salvar a su hijo fueron percibidos como una “molestia” por las autoridades estadounidenses. Las declaraciones de este viernes de la pareja responden a preguntas sobre cómo Estados Unidos puede salvar a otro rehén norteamericano, el trabajador humanitario Peter Kassig, desaparecido desde octubre de 2013 y que los terroristas amenazan de ejecución. Actualmente, la pareja se encuentra en Francia, con el fin de asistir a un homenaje a la memoria de su hijo, así como a otros periodistas muertos en los últimos meses en zonas de conflicto, con motivo de la entrega del Premio Bayeux de corresponsales de guerra. James Foley, quien trabajaba para el grupo de prensa norteamericano GlobalPost, para la Agencia France-Presse (AFP) y para otros medios de información cubriendo la crisis siria, fue secuestrado en noviembre de 2012 en el norte del país árabe, y decapitado el pasado el 19 de agosto. Hasta la fecha, el grupo terrorista EIIL ha decapitado a cuatro rehenes occidentales: James Foley; el periodista estadounidense Steven Sotloff (2 de septiembre de 2014) y los cooperantes británicos David Haines (14 de septiembre de 2014) y Alan Henning (3 de octubre de 2014). De momento, los terroristas takfiríes amenazan con la ejecución del trabajador humanitario estadounidense Peter Kassig, presentado al final del video de la decapitación de Henning, como la próxima víctima. Como afirma el EIIL, estas ejecuciones dependen de las decisiones del presidente estadounidense, Barack Obama, y sus aliados para abrir un frente de guerra contra este grupo terrorista y sus objetivos e intereses. El grupo takfirí EIIL, con miles de integrantes europeos y estadounidenses, controla varias zonas del norte de Siria, desde donde pudo, en junio, infiltrarse en el territorio iraquí y apoderarse rápidamente de algunas partes de ese país árabe. tas/ybm/nal