Según reportó el sábado el diario libanés Al-Jumhuriyah, el Mando General del Ejército libanés y el del sirio están estudiando los últimos detalles de su plan de coordinación militar en el marco de las operaciones para liberar las posiciones de la banda ultrarradical EIIL (Daesh, en árabe) cerca las regiones de Ras Baalbeck y Al-Qaa, en el este de El Líbano y limítrofe con Siria.
El referido rotativo explicó que los representantes de ambas partes han sostenido en los últimos días varias reuniones, en las que los planes y mapas geográficos fueron puestos sobre la mesa para dividir la región militarmente y definir las respectivas estrategias y misiones de cada una y el apoyo que necesitan.
Fuentes de seguridad citadas de manera anónima por Al-Jumhuriyah también negaron los informes sobre la posible participación de Estados Unidos o Rusia en la batalla.
El informe vino en la misma jornada en que el Ejército libanés llevó a cabo un intenso bombardeo contra las trincheras de Daesh en los altos de Al-Qaa, en la provincia de Beqaa.
La ofensiva se produjo una semana después de que el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) finalizara su exitosa ofensiva conjunta con el Ejército sirio para liberar de la presencia de los "terroristas" del Frente Al-Nusra (ahora se denomina Frente Fath Al-Sham) los altos de Arsal, en el lado libanés de la frontera, y los montes de Al-Qalamun, en la parte siria.
Ahora, con los altos de Arsal libres de facciones vinculadas a Al-Qaeda y en manos de Hezbolá, este movimiento tiene previsto participar en las batallas contra los terroristas de Daesh en ras Baalbek.
A este respecto, el diario británico Independent reportó el pasado viernes el reforzamiento de las filas del Ejército sirio y de Hezbolá, así como los preparativos que están realizando en el área para llevar a cabo el combate final contra Daesh, rodeado en la zona fronteriza.
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