• Miembro de un grupo terrorista en Siria.
Publicada: sábado, 21 de mayo de 2016 17:02
Actualizada: sábado, 1 de abril de 2017 3:07

Una figura de alto rango de un grupo terrorista que opera en Siria realizó un viaje breve a EE.UU., y dado que pasó los difíciles controles de ese país, es seguro que entró con el parabién de las autoridades estadounidenses.

Labib al-Nahhas, responsable de relaciones exteriores del grupo terrorista Ahrar al-Sham, que mantiene vínculos estrechos con la banda Frente Al-Nusra (rama local de Al-Qaeda), hace unos meses viajó a EE.UU. para un breve periodo de tiempo, pasando todos los controles.

De acuerdo con un informe de este sábado del diario Miami Herald, la información fue confirmada por cuatro personas con conocimiento directo del viaje y que desean permanecer en el anonimato debido a lo delicadas que son las relaciones de Washington con fuerzas insurgentes en Siria.

“Ellos están tratando a Labib al-Nahhas como si fuera alguien normal y, además, es útil tener a alguien del otro lado” , dice a la fuente Faysal Itani, un especialista de Siria para asuntos de Oriente Medio.

La visita no revelada es una cuestión sensible para ambas partes: el grupo terroristas arriesga su propia credibilidad debido a sus lazos con EE.UU. y este país teme ser blanco de críticas por dejar entrar al país a un terrorista, según la fuente.

Los analistas de seguridad creen que las autoridades de Estados Unidos con toda probabilidad estaban al tanto de la llegada de Al-Nahhas, alto rango de un grupo extremista cuyas interacciones con Frente Al-Nusra ha sido controladas durante varios años por las agencias de inteligencia del país.

Eso quiere decir que las autoridades estadounidenses autorizaron la entrada del sujeto en cuestión con un pasaporte europeo, en momentos en que los funcionarios de inmigración de EE.UU. están bajo presión política para impedir la entrada de visitantes incluso con meros vínculos con grupos extremistas.

“Ellos están tratando a Labib al-Nahhas como si fuera alguien normal y, además, es útil tener a alguien del otro lado”, dice a la fuente Faysal Itani, un especialista sirio para asuntos del Oriente Medio, quien, además, asegura que también sabía sobre la visita de Al-Nahhas a EE.UU.

 

El Departamento de Estado de EE.UU. se ha negado a responder sobre si algún funcionario estaba al tanto de la presencia de Al-Nahhas en el país, o si alguien en la instancia gubernamental le ayudó a entrar. “Estamos comprometidos con varias partes enfrentadas en Siria, pero no entramos en los detalles”, dijo en su momento el portavoz del Departamento de Estado, John Kirby.

La implicación de países extranjeros en la crisis siria no es nada nuevo. A principios de abril, las solicitudes de transporte de armas en un sitio Web federal estadounidense revelaron que Washington sigue enviando armas a Al-Qaeda y a otros grupos terroristas en Siria.

Además, el portal Web israelí DEBKAfile reveló la semana pasada que Arabia Saudí y Turquía suministraron al grupo terrorista Frente Al-Nusra misiles antitanques MILAN con los que atacó a las fuerzas de la Resistencia Islámica en la ciudad de Jan Tuman, ubicada en el sur de la provincia noroccidental de Alepo.

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