Tillerson esgrimió tres argumentos principales para no abandonar Siria, a saber: evitar el resurgimiento del grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe), allanar el camino para la salida del poder del presidente sirio, Bashar al-Asad, y reducir la influencia de Irán en el país árabe.
El titular estadounidense hizo esos comentarios sin referirse al papel que desempeñaron el Gobierno de Damasco y Teherán para expulsar a Daesh de distintas partes de Siria.
El experto en asuntos de Oriente Medio Koldo Salazar aborda el tema desde Cádiz (España) en una entrevista con HispanTV.
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