• El presidente de EE.UU., Donald Trump, habla con su par ruso, Vladimir Putin, en Hamburgo, Alemania, 7 de julio de 2017.
Publicada: jueves, 3 de agosto de 2017 21:17
Actualizada: viernes, 4 de agosto de 2017 2:25

Trump dice que no le gustó la conversación telefónica que mantuvo con el premier australiano, pero que le encantó conversar con Putin.

El diario estadounidense The Washington Post ha relevado este jueves la transcripción de una conversación telefónica mantenida en enero pasado entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y el primer ministro de Australia, Malcolm Turnbull.

Según pone de manifiesto el texto desvelado, la llamada de Trump con Turnbull se desarrolló en un ambiente de tensión debido a las criticas del inquilino de la Casa Blanca a un pacto de inmigración suscrito en noviembre pasado por su antecesor, Barack Obama, en el que este último se había comprometido a acoger en EE.UU. a 1250 refugiados de los países de Oriente Medio. En un momento, determinado Trump incluso llegó a decir que con ese acuerdo, Canberra tenía planeado exportar a los que definía como ‘"terroristas" a suelo estadounidense.

Al término de la llamada Trump, harto de discutir al respecto con Turnbull, que defendía el señalado pacto y quería asegurarse de que la nueva Administración de EE.UU. cumpliría su promesa de acoger a 1250 refugiados hacinados en Australia dijo: "En lo que a mí respecta, ya es suficiente Malcolm. Ya estoy hasta la coronilla. Llevo todo el día haciendo llamadas, y esta es la más desagradable de todas. La que mantuve con el (presidente de Rusia, VladimirPutin fue una llamada agradable. Esta es ridícula".

El primer encuentro entre ambos líderes, después de la susodicha conversación telefónica, fue en mayo pasado, que tampoco progresó en un ambiente agradable y el presidente de EE.UU. prácticamente ignoró al primer ministro de Australia, cuando este le tendió la mano.

En lo que a mí respecta, ya es suficiente Malcolm. Ya estoy hasta la coronilla. Llevo todo el día haciendo llamadas, y esta es la más desagradable de todas. La que mantuve con Putin fue una llamada agradable. Esta es ridícula", dijo el presidente de EE.UU. Donald Trump

 

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