La Corte Suprema de Estados Unidos ha autorizado la entrada en vigor de dicho decreto después de las disputas que mantuvo durante cinco meses con grupos pro derechos humanos, han informado los medios locales.
Según la polémica orden, los ciudadanos de Irán, Libia, Somalia, Sudán, Siria y Yemen no podrán entrar a Estados Unidos durante un período de 90 días. La prohibición no incluye a quienes quieran visitar a familiares cercanos, pero en este concepto no se incluye a abuelos, nietos y tíos, entre otros.
El pasado 27 de enero, el mandatario estadounidense suspendió por decreto la llegada de refugiados a suelo estadounidense procedentes de siete países musulmanes —acusados de una presunta implicación en agresiones relacionadas con el terrorismo dentro de EE.UU.—, pero en marzo excluyó a Irak.
fdd/mla/mkh/rba