El Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM, por sus siglas en inglés) ha aclarado este sábado que tal cifra pertenece a las víctimas civiles de los ataques de la llamada coalición liderada por el país norteamericano contra el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) entre noviembre de 2016 y enero de 2017 en los referidos países árabes.
“Nueve informes (sobre víctimas mortales) fueron reconocidos fiables, al menos 21 personas murieron y dos resultaron heridas”, se lee en el comunicado del CENTCOM, donde se alega que las bajas se debieron a ataques accidentales.
Nueve informes (sobre víctimas mortales) fueron reconocidos fiables, al menos 21 personas murieron y dos resultaron heridas”, según el comunicado del Comando Central de Estados Unidos.
Conforme al texto, en total en el mes de enero la referida entidad estudió datos sobre 10 ataques en los meses anteriores y sobre 27 nuevos ataques, y en 19 de ellos existían grandes posibilidades de que los civiles de Irak y Siria resultaran heridos.
Además, en 10 casos, el país norteamericano ha admitido bajas mortales entre los civiles, dos en noviembre, tres en diciembre y cinco en enero.
EE.UU. comenzó en agosto de 2014 a bombardear distintas regiones de Irak so pretexto de combatir a Daesh y amplió el 23 de septiembre de ese mismo año su campaña a Siria en el marco de una coalición en la que participan varios de sus aliados regionales y occidentales.
Tanto el Gobierno de Irak como el de Siria cuestionan la efectividad de dichos bombardeos y critican a la citada coalición por los daños estructurales y las muchas víctimas civiles que han dejado tras de sí sus acciones.
Señalar que las cifras parecen exceder con mucho las confirmadas por EE.UU. En octubre de 2016, Amnistía Internacional (AI) informó de que los bombardeos de la llamada coalición internacional han provocado solo en Siria la muerte de 300 civiles en los últimos dos años.
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