Durante una visita a las zonas fronterizas entre Irán y Afganistán, el general de brigada Qasem Rezai, subjefe del Comando Disciplinario de la República Islámica, afirmó que las fronteras de Irán y Afganistán se encuentran en paz. Enfatizó que las zonas limítrofes de Irán con sus vecinos son fronteras de la amistad y las partes no deben permitir hechos lamentables como el de sábado.
El comandante de la Fuerza Terrestre del Ejército iraní, el general de brigada Kiumars Heidari, quien también estaba presente en la zona, asegura que hay control total en las fronteras con Afganistán, y la seguridad está completamente establecida. Agrega que la presencia de altos militares en la zona no significa la presencia de amenazas en la región. Pidió a los países vecinos que se adhieran a las normativas fronterizas y mantener un gesto de “buena vecindad”.
Las tensiones en las zonas fronterizas entre Irán y Afganistán estallaron el sábado, cuando grupos delincuentes y narcotraficantes abrieron fuego, desde territorio afgano, contra un puesto de la Policía iraní en la provincia suroriental de Sistán y Baluchistán, donde la República Islámica lucha contra los grupos criminales. A pesar de recibir advertencias de los agentes iraníes, continuaron los disparos contra el puesto de seguridad, por lo que las guaridas iraníes del puesto fronterizo de Sasuli, respondieron “con determinación”, e infligieron graves daños a los agresores.
El intercambio de disparos dejó varios muertos y heridos. Entre las víctimas hay dos guardias fronterizos iraníes. Asimismo, se produjeron graves bajas entre los delincuentes, según confirma la parte iraní. Por su parte, las autoridades talibanas también señalan que la situación está “bajo control” y que el gobierno afgano no quiere una guerra con su vecino.
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