Las causas que rodean la muerte violenta de la momia egipcia Takabuti han sido objeto de muchas incógnitas desde que fue desenvuelta en Belfast, capital de Irlanda del Norte, en 1835.
Estudios anteriores sugerían que Takabuti murió a causa de una herida de cuchillo infligida cerca de su hombro izquierdo. Sin embargo, las nuevas evidencias indican que su atacante habría utilizado un hacha con un borde afilado semicircular de al menos 7 cm de longitud.
Takabuti fue una mujer casada que supervisaba una casa importante, probablemente en la antigua ciudad de Tebas, donde hoy se encuentra Luxor (sur de Egipto). No parecía tener ninguna enfermedad crónica y murió muy joven, cuando tenía entre 20 y 30 años.
Mediante una amplia variedad de técnicas como análisis de ADN, rayos X, tomografías computarizadas, análisis del cabello, materiales de empaque de momificación y datación por radiocarbono, el equipo de investigadores pudo entender con más detalle varios aspectos de la vida de la víctima.
mmo/ncl/rba