El Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), iniciaron diálogos de paz para finalizar el conflicto armado que azota el país por más de 5 décadas.
Ambas partes se mostraron dispuestas a dialogar, pero hubo críticas de parte y parte. Así Bogotá advirtió a la guerrilla para que abandone los secuestros.
Por su parte, ELN instó al gobierno a asumir su responsabilidad en el conflicto. Además expresó su esperanza de que estas conversaciones puedan conducir a una solución política.
La liberación de al excongresista, Odín Sánchez, por parte del ELN destraba los diálogos que desde el pasado marzo, las partes intentaban avanzar.
La guerrilla, también liberó al soldado recién capturado Fredy Moreno Mahecha, mientras que Bogotá a su vez indultó a dos rebeldes presos.
Este grupo armado, que actualmente cuenta con 1500 combatientes, fue fundado en 1964 para luchar contra la desigualdad en la distribución de la tierra y las riquezas de Colombia. Pactar con ellos sería otro paso hacia la paz en el país sudamericano.
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