• Fuerzas de la Policía de Brasil realizan una operación para establecer la paz y evitar cualquier atentado durante los Juegos Olímpicos (JJOO) de Río de Janeiro, 2016.
Publicada: sábado, 23 de julio de 2016 6:46

Mientras la Policía brasileña se encarga de preparar el país de cara a los Juegos Olímpicos (JJOO), un presunto miembro de Daesh se entrega voluntariamente.

El presunto terrorista vinculado al grupo ultraviolento EIIL (Daesh, en árabe) sorprendió el viernes a la Policía Federal de Brasil tras entregarse de manera voluntaria poco después de las 18H00, hora local, informó el mismo viernes el diario local Estadao.

De acuerdo con la nota, el ahora detenido, identificado como Valdir Pereira da Rocha, se encontraba en Mato Grosso, al norte de la región Centro-Este, en la frontera con Bolivia, y se entregó a las autoridades después de que se emitiera una orden de detención en su contra.

Las autoridades todavía buscan a otra persona, contra la que también fue emitida una orden de arresto por sospecha de terrorismo y que no ha sido localizada. Además, el hecho sucedió horas después de la "Operación Hashtag", gracias a la cual la Policía del país sudamericano capturó a varios simpatizantes de la referida banda takfirí mientras se estaban preparando para llevar a cabo actividades terroristas durante los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, 2016.

Según las investigaciones, los arrestados pertenecen a una célula aficionada de brasileños que prometió recientemente lealtad a Daesh y que solo mantuvo contactos a través de servicios de mensajería por Internet.

Mediante las redes sociales, ese grupo intercambiaba mensajes de apología del terrorismo en los que se ensalzaban los atentados ocurridos en los últimos meses en Europa, y en los que sus integrantes planeaban la compra de armas con la supuesta intención de realizar un atentado durante los Juegos Olímpicos del próximo mes de agosto.

Ante estos hechos, el Gobierno brasileño ha prometido fortalecer las medidas de seguridad en los JJOO y asevera que cualquier plan de ataque habría tenido pocas posibilidades de llegar a buen término, citando la falta de recursos y capacidades del grupo. Durante los JJOO, Brasil desplegará más de 80 mil militares, un número que quizás aumente tras las últimas detenciones.

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