Según los testigos, varias personas han resultaron heridas en los enfrentamientos con la policía en varias regiones del país.
Los manifestantes, convocados por la Coalición del 14 de febrero, coreaban consignas como: "con el alma, con la sangre, nos sacrificamos por ti Bahréin" o "Abajo Hamad", el rey bareiní.
En algunas partes, los manifestantes han incendiado neumáticos para bloquear las carreteras, mientras la policía cortaba los accesos a Manama (capital).
En medio de una brutal represión de las marchas antigubernamentales, el jefe de la seguridad pública, el general Tariq al-Hasan, ha advertido a la población de que se aleje de las zonas donde tienen lugar las manifestaciones.
Por otra parte, Amnistía Internacional (AI) llamó el viernes al régimen de Al Jalifa a respetar la libertad de expresión pacífica y controlar a las fuerzas de seguridad.
Desde febrero de 2011, los bareiníes protagonizan manifestaciones casi diarias contra la monarquía Al Jalifa para reclamar, entre otros derechos, el fin del “monopolio de poder” y la instauración de un sistema constitucional y un poder judicial independiente.
Como contramedida, el régimen de Al Jalifa impuso en marzo de 2011 la Ley de Seguridad Nacional, que dio lugar a la entrada de tropas saudíes y emiratíes para sofocar las manifestaciones.
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