• Un niño yemení llora cerca de los escombros de casas destruidas por un ataque aéreo saudí en el pueblo okash, cerca de Saná, capital.
Publicada: jueves, 30 de abril de 2015 12:20

La intervención militar saudí en Yemen ha provocado el desplazamiento de más de 300 mil personas, anunció el martes la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).

Las plantas potabilizadoras de agua de Saná (capital) han cerrado y la actividad del transporte público y de las instituciones financieras se ha visto reducida”.

De acuerdo con la OCHA, la cifra ha aumentado a más del doble respecto a la estimación anterior de 150.000, que data del 17 de abril.

Esa oficina de la ONU denunció la catastrófica situación humanitaria en Yemen, donde la escasez del combustible y agua ha tenido graves consecuencias para los servicios públicos y el sector privado.

Las plantas potabilizadoras de agua de Saná (capital) han cerrado y la actividad del transporte público y de las instituciones financieras se ha visto reducida”, agregó.

Yemeníes esperan llenar sus bidones con agua de un grifo público en medio de una aguda escasez de agua en la capital yemení, Saná.

 

Además, lamentó que los civiles se conviertan en el blanco de los ataques y recordó que “todas las partes del conflicto están obligadas por el Derecho Internacional Humanitario a respetar y proteger a los civiles".

Por otro lado, al menos 64 personas murieron en la misma jornada del martes en los enfrentamientos entre los combatientes del movimiento popular Ansarolá y las fuerzas leales al expresidente fugitivo Abdu Rabu Masnur Hadi.

Los choques tuvieron lugar en diferentes partes del país árabe, incluidas las provincias de Marib (centro), Adén (sur) y Taiz (suroeste).

Hasta el momento, al menos 3512 personas han muerto y otras 6189 han resultado heridas en ataques saudíes, según un instituto pro derechos humanos en Yemen.

La intervención militar saudí, comenzada el pasado 26 de marzo, ha provocado caos y además de hacer retroceder unos cien años la situación económica y humanitaria de Yemen, ha ayudado a Al-Qaeda, enemigo de Ansarolá, a aumentar su presencia en el país más pobre del mundo árabe.

kaa/ktg/hnb