La corte votó por 5 a 4 que las garantías de la Constitución del debido proceso y la protección igualitaria bajo la ley implican que los estados no pueden prohibir los matrimonios de parejas del mismo sexo.
Esta decisión fortalecerá todas nuestras comunidades. Ofrecerá a todas las parejas homosexuales la dignidad que merecen, indicó Barack Obama.
Con este dictamen, los matrimonios homosexuales serán legales en los 50 estados del país.
Dos años después de haber decretado que el matrimonio no era exclusivo de las parejas heterosexuales, la corte dictaminó que los 14 estados, que actualmente se niegan a unir a dos personas del mismo sexo, deben ahora casarlos, además de reconocer su matrimonio, si fue celebrado en otra jurisdicción.
En nombre del principio de igualdad de todos ante la ley, "la 14 Enmienda (de la Carta Magna) requiere que un estado celebre el matrimonio entre dos personas del mismo sexo", escribió el juez Anthony Kennedy en nombre de la corte.
El magistrado conservador unió su voto a los de cuatro magistrados progresistas del alto tribunal para permitir que los gays y las lesbianas puedan casarse en todos los rincones de Estados Unidos.
El presidente de la Corte, John Roberts, se opuso a la decisión, al igual que los otros tres jueces conservadores.

Por su parte, el presidente de EE.UU., Barack Obama, calificó de "una victoria para América" el fallo del Tribunal Supremo que confirmó el derecho constitucional de las parejas homosexuales a contraer matrimonio en cualquier lugar del país.
"Esta decisión fortalecerá todas nuestras comunidades. Ofrecerá a todas las parejas homosexuales la dignidad que merecen", dijo Obama en una emotiva alocución desde los jardínes de la Casa Blanca, tras conocerse la decisión del Alto Tribunal.
El presidente reconoció, no obstante, que aún "hay mucho trabajo por hacer para extender la promesa de que EE.UU. sea igual para todos los estadounidenses", pero "hoy podemos decir, en términos muy claros, que hemos hecho nuestra unión un poco más perfecto".
mah/ctl/kaa
