“Necesitamos un grupo de combate avanzado estacionado en las islas Kuriles. Todas las condiciones necesarias para ello han sido cumplidas en concordancia con las decisiones tomadas por el comandante en jefe”, ha dicho Medvedev en una visita a la isla Iturup, la isla más grande del archipiélago cuya soberanía reclama Japón.
Necesitamos un grupo de combate avanzado estacionado en las islas Kuriles. Todas las condiciones necesarias para ello han sido cumplidas en concordancia con las decisiones tomadas por el comandante en jefe”, asegura el primer ministro ruso, Dmitri Medvedev.

El alto cargo ruso ha hecho estas declaraciones ante los periodistas en un viaje con el objetivo de asistir a un foro e inspeccionar las infraestructuras de la isla, señala la agencia rusa Sputnik.
El acto ha levantado una enorme indignación por parte de Tokio de tal modo que el ministro nipón de Exteriores, Fumio Kishida, envió una nota de protesta al representante diplomático ruso en Japón, Evgueni Afanasiev, según la agencia Kyodo.
Pero la respuesta de Moscú fue clara: “los viajes a esta región rusa continuarán”, indica un comunicado emitido horas después por el Ministerio ruso de Exteriores. Además, ha pedido a Tokio esfuerzos destinados a mejorar los lazos.
En junio, el Ministro ruso de Defensa, Sergei Shoigu, ordenó duplicar las construcciones en instalaciones militares en las islas Kuriles.
Rusia y Japón no lograron firmar un tratado de paz permanente desde el fin de la II Guerra Mundial (1939-1945), ya que Tokio lo condiciona a la devolución de las cuatro islas del archipiélago de las Kuriles (Iturup, Kunashir, Shikotan y Habomai).
Tokio argumenta su petición según el Tratado Bilateral de Comercio y Fronteras que firmó con Rusia en 1855. La parte rusa, en cambio, se basa en varios acuerdos internacionales para alegar que estas islas fueron traspasadas a la Unión Soviética (URSS) tras la II Guerra Mundial.
Además, Moscu sostiene que estos territorios pertenecen a la Federación Rusa como sucesora legal de la URSS.
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