"Está diseñado para fracasar (el tercer rescate)" y es el punto final a una especie de "golpe de Estado" de los acreedores, ha dicho el exministro de Finanzas en una entrevista con el diario español El País.
Se basa en proseguir con la farsa de la patada hacia adelante: prorrogar la crisis con nuevos préstamos insostenibles, y fingir que eso resuelve el problema", ha dicho el exministro de Finanzas griego.
Varoufakis argumenta que el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, nunca estuvo interesado en acordar nada que pueda funcionar, y que su plan es "rediseñar la eurozona" echando a Grecia de ella, a la vez que añade que el acuerdo no es una alternativa al plan de Schäuble sino que es parte de él.
El exministro opina que el acuerdo "se basa en proseguir con la farsa de la patada hacia adelante: prorrogar la crisis con nuevos préstamos insostenibles, y fingir que eso resuelve el problema" y añade que este no tiene futuro.
En este contexto añade que la Europa que atemoriza con la salida de Grecia del euro, va camino de convertirse en una idea siniestra, con fuertes dosis de prejuicios morales y un pésimo diagnóstico de la crisis que ha llevado a recetar políticas profundamente equivocadas una y otra vez.

En relación a recientes declaraciones del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en las que indica que otros países se podrían encontrar en la misma situación que el país heleno si partidos similares a la Coalición de la Izquierda Radical (Syriza, en griego) estuviesen al mando, Varoufakis sostiene que Grecia “se ha convertido en una especie de pelota de fútbol para los políticos de derechas, que insisten en asustar con Grecia a la población”.
Por otra parte, opina que "los españoles tienen que mirar su situación económica y social y sobre eso valorar qué es lo que su país necesita independientemente de lo que pase en Grecia o donde sea".
Asimismo advierte que el peligro de convertirse en Grecia siempre sigue ahí y se hará real si se siguen repitiendo los mismos errores que se ejecutaron en su país.
Recientemente se reveló que el exministro podría ser condenado a prisión por preparar un plan de contingencia y de regreso a la moneda nacional griega, con el que ha asegurado que pese a que "ya es historia" pretendía "responder a los actos de agresión por parte del Banco Central Europeo, el Eurogrupo y demás instituciones".
Finalmente señala que aunque no desea el "grexit" (salida del euro), habrá "mucho ruido, retrasos, incumplimiento de objetivos, más recesión y problemas políticos".

Grecia, desde el comienzo de su crisis económica, había recibido dos rescates financieros anteriores por parte de la Unión Europea (UE), para poder así paliar su situación económica y responder a sus compromisos con las instituciones financieras internacionales.
A raíz de los ajustes económicos llevados a cabo por el anterior Gobierno de Atenas (para responder a los compromisos asumidos al recibir los rescates anteriores), los helenos optaron por un cambio. Es por eso que, en las últimas elecciones generales del país, en enero de 2015, tomó las riendas del país el candidato del partido Syriza, Alexis Tsipras, quien prometía acabar con los ajustes impuestos por la UE.
Tsipras, durante su gestión de gobierno, convocó un referéndum para que los griegos decidieran su futuro respecto a las exigencias europeas para el tercer rescate. No obstante, la victoria del "No" generó una nueva crisis con los socios europeos, incluso se barajó la salida de Grecia de la zona euro, pero al final llegaron a un acuerdo el 12 de julio en Bruselas (Belgica), a fin de establecer las medidas necesarias para la aprobación de un tercer rescate financiero al país heleno.
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