• Puesto de control en la frontera de Dinamarca con Alemania.
Publicada: lunes, 4 de enero de 2016 15:19
Actualizada: lunes, 4 de enero de 2016 15:44

Dinamarca establecerá controles en su frontera con Alemania para impedir la entrada de refugiados, anuncia el primer ministro danés, Lars Lokke Rasmussen.

"Que otros países nórdicos cierren sus fronteras puede tener grandes consecuencias para Dinamarca. Esto puede provocar más demandas de asilo", ha declarado este lunes en una rueda de prensa el primer ministro de Dinamarca, justo el mismo día en que Suecia ha adoptado la misma medida en la frontera danesa.

Que otros países nórdicos cierren sus fronteras puede tener grandes consecuencias para Dinamarca. Esto puede provocar más demandas de asilo", ha declarado en una rueda de prensa el primer ministro de Dinamarca, Lars Lokke Rasmussen.

Rasmussen, que encabeza un gobierno liberal que busca limitar las llegadas de refugiados al país, ya había advertido que reaccionaría a los controles sistemáticos anunciados por Suecia, y tras dicha imposición el premier ha indicado: "Reaccionamos a una decisión tomada por Suecia (...) No es en absoluto una situación feliz".

Ha manifestado que los controles fronterizos no serán sin embargo sistemáticos, sino aleatorios, y que en un principio se instaurarán por un período de diez días; tiempo que podrá ser ampliado.

Suecia, superada por acogida de personas en busca de asilo, desde este lunes exige presentar un documento de identidad para atravesar por tren o autobús el puente de Öresund, principal puerta de ingreso de refugiados al país.

Refugiados, principalmente sirios, toman un tren hacia Suecia en la estación de Padborg en Dinamarca.

 

Por otro lado, el portavoz del Ministerio de Exteriores de Alemania, Martin Schäfer, ha afirmado en esta misma jornada que los principios de la zona Schengen de libre circulación de los ciudadanos dentro de la Unión Europea (UE) están "en peligro".

En los últimos meses, Europa ha afrontado una afluencia sin precedentes de refugiados provenientes, sobre todo, de países azotados por el terrorismo de grupos como el EIIL (Daesh, en árabe), entre ellos Siria, Irak y Afganistán, adqueriendo una gran magnitud entre agosto y noviembre, y generado tensiones entre Suecia, país que recibió 163.000 demandas de asilo el año pasado, la mayor proporción por habitantes de la UE, y Dinamarca, que recibió 18.000.

Vale mencionar que Dinamarca a principios de septiembre cerró las conexiones ferroviarias con Alemania para impedir la llegada de refugiados a Suecia.

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