Con la recuperación de Alepo, los residentes de las dos asediadas ciudades de Al-Fuah y Kafarya anidaron la esperanza de una libertad inminente del asedio de los terroristas.
Tras la finalización de la operación militar en Alepo y la salida de los terroristas y sus familias de Al-Fuah y Kafarya, mujeres y niños, junto a los ancianos, también fueron evacuados a través de esta ruta, Al-Ramousa, que los terroristas aún mantenían bajo su control desde el otro lado.
Varios periodistas y fotógrafos de todo el mundo se apresuraron a acudir al área para dar la noticia de la operación de intercambio.